Destinos en América

Invierno en las rocosas

Las Montañas Rocosas declaradas Patrimonio de la humanidad por la UNESCO y consideradas la columna vertebral de América del Norte. Un auténtico paraíso que atrae no sólo a aventureros sino a fotográfo,  senderistas y amantes de la naturaleza. Los hábitats que albergan, la diversidad de fauna y flora y los paisajes es una de las atracciones de este viaje. Para disfrutar del blanco invierno canadiense es preciso ver los bosques nevados y los lagos congelados que no dejan indiferente a nadie.

Costa Rica, un poco de todo

Con senderos que parece que conducen a cascadas, lagos y cráteres envueltos en la niebla o desiertas playas bordeadas de selva. Costa Rica es un país con costas del Caribe y del Pacífico, un verdadero paraíso tropical que alberga el Parque Nacional de Tortuguero, famoso por la espectacularidad de sus tortugas gigantes; las paradisíacas playas de Manuel Antonio o el Volcán Arenal considerado uno de los más bellos del mundo.

Invierno en Vancouver y Whistler

Un perfecto Road Trip para visitar ambas ciudades cumbres en Canadá, separadas por tan sólo 121 kilómetros. Temperaturas moderadas cercanas a los picos alpinos y un lugar que combina la cultura y los atractivos culinarios. Whistler, considerado el resort con la mejor estación de esquí y Vancouver con el famoso Grouse Montain hacen de estos uno de los mejores destinos para un paseo en invierno. 

Costa Rica de volcanes, montañas y playas

Un pequeño país ubicado entre las dos Américas con la mayor biodiversidad del mundo. Costa Rica  es conocida por la bondad de sus habitantes, por los numerosos Parques Nacionales y Reservas Biológicas, por la imponencia de sus volcanes y la cantidad de animales y flora que posee. La ciudad de San José en el Valle Central situada dentro de un paraíso tropical o Tamarindo en la Costa Pacífica ideal para hacer surf, unos de los lugares imprescindibles para visitar.

Whistler espectacular

Un municipio turístico ubicado en las montañas costeras del sur de la Columbia Británica. Es un destino famoso por albergar Whistler Blackcomb, uno de los centros de esquí más grandes de todo América del Norte, pero en verano, en cambio, se convierte en la  estación de los fans del ciclismo, kayak o montañismo.